La comunidad es responsable civil ante cualquier problema que pueda afectar a un vecino por una mala gestión de las instalaciones comunes. En estas situaciones desafortunadas, pueden emprenderse acciones legales para pedir un resarcimiento económico.
Pero, ¿qué pasa cuando hay problemas con el seguro? Te explicamos cuáles son los problemas habituales y, sobre todo, cómo reclamar a tu seguro de la comunidad.
¿Qué daños se pueden reclamar al seguro de la comunidad de vecinos?
Debes saber que los propietarios de cualquier comunidad están protegidos en determinadas situaciones.
La Ley de Propiedad Horizontal (LPH) establece en su artículo 9.1 que “cada propietario tiene derecho a que la comunidad le resarza de los daños y perjuicios ocasionados”.
Algunos de los daños que se pueden reclamar al seguro de la comunidad son:
→ Si la reparación de espacios comunes obliga a desalojar una vivienda, o cesar total o parcialmente la actividad de un local comercial, debe indemnizarse al afectado por los gastos ocasionados.
→ También procede la reclamación ante una situación de desalojo forzoso de una vivienda, si en la misma deben efectuarse obras para arreglar un elemento común.
→ Si se realizan obras que afectan a una plaza de garaje particular, imposibilitando su uso.
→ También puede iniciarse un procedimiento si el dueño de un local no puede alquilarlo debido a, por ejemplo, malos olores o a inundaciones provocadas por el mal estado de las cañerías comunitarias.
→ Se pueden presentar reclamaciones por daños morales si un propietario se ha visto forzado a abandonar una vivienda por falta de mantenimiento de la comunidad.
→ Los ruidos de un ascensor pueden ser motivo de reclamación en ciertos casos. También debe pagarse una indemnización a aquellos propietarios cuyos locales hayan sido afectados por la instalación de un ascensor, también por la depreciación de una vivienda cuyo patio haya sido utilizado para dicha instalación.
Estos son solo algunos ejemplos de incidencias comunes, aunque cada situación y cada finca tienen sus particularidades.
Lo mejor, en estos casos, es consultar con un asesor especializado. Pero, tras haber identificado el problema, lo siguiente es reclamar al seguro de la comunidad.
Problemas más habituales con el seguro de la comunidad
A lo largo del tiempo son muchos los problemas que pueden surgir con el seguro de una comunidad. Como la casuística es inabarcable, vamos a exponer cuáles son los más habituales.
Una reparación que se demora
Hay muchas razones por las que se puede demorar una reparación:
Atención urgente
La mayoría de los seguros disponen de un servicio de urgencia para reparaciones que han de ser resueltas de inmediato. Por ejemplo, una rotura de tubería. Aunque cada póliza o compañía dispone de su propia política, lo normal es que el reparador contacte en plazo de 2-3h y que la reparación quede resuelta en 24h. La falta de piezas específicas o la necesidad de un segunda intervención son algunas causas.
Atención no urgente
Surge una avería no cubierta por el seguro y el seguro debe reparar los daños estéticos tras la reparación del origen. Pero van pasando los días y el seguro no da señales de vida… En estos casos, después de interminables llamadas la reparación se termina llevando a cabo, pero tras un periodo de espera más extenso que el habitual, con el perjuicio que eso supone. La llegada de piezas y la dificultad para concertar una cita en un momento en el que sea aceptable para los implicados a veces demora la solución.
Pago que no cubre el gasto de reparación
Como decíamos antes, lo habitual es emprender la reparación y pasarle la factura al seguro. Este trámite suele ser más fácil para las compañías y más rápido para las comunidades de propietarios. Sin embargo, se puede dar el caso de que la compañía decida que la factura es excesiva para la reparación requerida.
Otras veces son las coberturas contratadas las que se quedan cortas cuando se produce el siniestro. Por ello, si estamos ante un infraseguro o los seguros con coberturas mínimas, como usuarios debemos leerlos con atención previa, ya que su enunciado puede indicar qué se incluye y que no en el seguro.
También se puede dar el caso de que la compañía decida dar una indemnización menor que el valor de lo asegurado. Puede ser culpa de compañías o puede ser culpa del propio asegurado. Esto último se da cuando se ha contratado un infraseguro.
¿Sabes qué es el infraseguro en comunidades y las consecuencias que puede tener? Te lo contamos todo en este artículo
El seguro no lo cubre
Puede que esta sea la opción que produce más impotencia de las tres. Un situación habitual es llevar muchos años pagando el seguro sin dar un parte y cuando pasa algo nos indican que no entraba en cobertura.
Al contratar el seguro, es importante revisar todas las cláusulas. Te explicamos aquí qué cubre el seguro de la comunidad.
¿Cómo evitar reclamar al seguro de la comunidad?
Para evitar desagradables sorpresas a la hora de echar mano del seguro de tu comunidad, ponte en contacto con nuestros asesores.
Ellos analizarán las necesidades de tu comunidad y las diferentes alternativas del mercado asegurador, eligiendo las condiciones más adecuadas ti.
Confía en la labor del corredor de seguros es asesorarte en la elección y gestión de tu seguro, para entenderlo y comprender que estamos cubriendo y que no. Nuestros profesionales te ayudarán en esta labor.
Nuestro compromiso es proporcionarte un servicio exclusivo y personalizado ofreciéndote además los mejores precios del mercado.
Llámanos al 91 422 55 00 o rellena el siguiente formulario.
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